Internacional
¿Por qué Nancy Pelosi decidió visitar Taiwán a pesar de las advertencias de China?
A sus 82 años, la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, está protagonizando una escalada geopolítica entre las dos principales potencias del mundo y todo el mundo se pregunta: ¿por qué?
Nancy Pelosi llegó a Taiwán el martes como parte de su gira por Asia, un viaje que ya había sido confirmado por un alto funcionario del gobierno taiwanés y un funcionario estadounidense. El viaje no figuraba en el itinerario público de Pelosi, y se produce en un momento en que las relaciones entre Estados Unidos y China están en un punto bajo.
Es la primera vez en 25 años que un Presidente de la Cámara de Representantes visita Taiwán, una isla autónoma que la República Popular China considera una provincia rebelde. El republicano Newt Gingrich fue el último en hacerlo, en 1997.
El conflicto entre China (nombre oficial: República Popular China) y Taiwán (nombre oficial: República de China) se remonta a 1949, cuando las fuerzas comunistas de Mao Zedong triunfaron en la guerra civil contra los nacionalistas de Chiang Kai-shek, que se exiliaron en la isla de Taiwán. Desde entonces, Taipei y Pekín reconocen la existencia de un único país que debe reunificarse -el principio de “una sola China”-, pero discrepan sobre quién es la autoridad legítima.
¿Porqué China amenazó a Estados Unidos?
Actualmente, Taiwán tiene un reconocimiento limitado en la comunidad internacional, aunque no siempre fue así. Estados Unidos, que tampoco reconoce actualmente a la isla como país independiente y se adhiere al principio de “una sola China”, mantiene una muy buena relación política y defensiva con el gobierno de Taipei, al que reconoció como legítimo en China hasta 1979, cuando pasó a reconocer al gobierno de Pekín.
Las advertencias de China sobre el posible viaje de Pelosi a Taiwán
La filtración de la visita de Pelosi había provocado las advertencias de China sobre las “atroces” consecuencias políticas que esto supondría para las relaciones con Estados Unidos. Pekín también dijo que sus militares “no se quedarán de brazos cruzados”.
“El principio de ‘una sola China’ es el consenso universal de la comunidad internacional, la base política de los intercambios de China con otros países, el núcleo de los intereses de China y una línea roja y de fondo incuestionable”, dijo el martes el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, en un comunicado.
“Algunos políticos en Estados Unidos sólo se preocupan por sus propios intereses, juegan abiertamente con fuego en la cuestión de Taiwán y se convierten en enemigos de los 1.400 millones de chinos, lo que nunca acabará bien”, añadió Wang.
El presidente chino, Xi Jinping, advirtió el jueves a Estados Unidos de que no debe “jugar con fuego” en la cuestión de Taiwán durante una larga llamada telefónica con el presidente estadounidense, Joe Biden.
Existen precedentes recientes de este tipo de visitas: en junio de 2021, un grupo de senadores estadounidenses voló a Taiwán en un avión militar para anunciar una importante donación de vacunas contra el virus Covid-19, y el viaje también fue considerado por Pekín como una provocación.
¿Entonces?, ¿Por qué insistió Nancy Pelosi en este viaje?
La relación entre Estados Unidos y China, las dos mayores potencias económicas del mundo, está en horas bajas, con tensiones geopolíticas periódicas en el Océano Pacífico en medio de una creciente rivalidad comercial y estratégica entre Washington y Pekín que se extiende por todo el mundo.
Habría sido políticamente inviable, por razones estratégicas y por la posición de EE.UU. en el mundo, que Pelosi se echara atrás en su visita a Taiwán sólo por las advertencias de Pekín, argumenta Collinson. Más aún teniendo en cuenta que Pelosi ha definido su carrera política, al menos en parte, sobre la base de la confrontación con China.